Ayer, los alumnos de 6º de Primaria del Colegio Espiríritu Santo de nuestra localidad, quisieron celebrar con nosotros el día de la Lectura en Andalucía. La actividad lecturas divertidas, lecturas compartidas fue la protagonista de la jornada, gracias a la colaboración de la Biblioteca Central de Córdoba que nos facilitó treinta ejemplares del libro La tarta voladora del escritor Gianni Rodari y de Cruz Roja Juventud con el juego de la Oca humana.
Esta lectura, que durante el mes de noviembre y diciembre los alumnos ya había leído previamente en clase, nos permitió profundizar en el escritor Gianni Rodari, que tanto significó para el mundo de la literatura infantil y la enseñanza, e introducirnos en la historia que vivió una mañana de abril el barrio de Trullo al encontrar un enorme objeto circular.
Para un autor como Gianni Rodari que luchó por los cambios en el ámbito pedagógico, abogando por una escuela que le devolviera a los niños la confianza y donde la risa fuera un motor importante para aprender a través del juego, el diseño de la actividad no podía tener solamente una tertulia literaria, por lo que apostamos por introducir el juego, esta oca humana con la que fuimos descubriendo los entresijos del libro y el poder transformador que tiene el lenguaje de Rodari para cambiar el mundo.
Formamos cuatro equipos con nombres de tartas ( equipo tarta de fresa, equipo tarta de chocolate, equipo tarta de vainilla y equipo tarta de naranja) haciendo alusión a la figura central del libro.
Y comienza nuestro juego, tirando los dados y contestando a una pregunta, relacionada con nuestra lectura, cada vez que nos paramos en una casilla de la Oca humana. Si la pregunta no se acierta le toca el turno al siguiente equipo y así sucesivamente. Ganó el equipo Tarta de fresa que primero llegó a la casilla final.
Con cada una de las preguntas nos permitió introducirnos en el mundo de la ciencia y sus avances, descubrir a cuatro a los científicos que el profesor Terenzio hace alusión : Galileo Galilei, Copérnico, Newton y Einstein y adentrarnos en sus principales descubrimientos. Hablar de guerras y pacifismo, de bombas y de bomba atómica...y para finalizar de los gastos superfluos en investigación y armamento.
Y es que Gianni Rodari (1920-1980) escritor, periodista, poeta, maestro y activista político, fue el primero que se atrevió a hablar en la literatura infantil y juvenil de los problemas sociales más importantes de su tiempo, un tema hasta entonces tabú. Para este escritor la temática para niños y adultos tenía que ser la misma, tan solo lo que había que adaptar es la exposición para ponerla al nivel de comprensión del público infantil.
De una forma divertida, con la ayuda de dos niños, Rita y Paolo nos adentra en una historia un poco absurda, como el hecho de que una enorme tarta cubra el cielo de todo un barrio y vaya a posarse en la cima de una colina con miles de kilos de nata, crema chocolate, crocanti, frutas escarchadas..., pero Rodari se va a valer de este hecho para plasmar cosas que no tienen nada de absurdas, como el que los niños sean los únicos capaces de plasmar la importancia del trabajo en equipo y compartir el juego imaginativo aceptando con naturalidad un acontecimiento que conmociona a todo un barrio . Al mismo tiempo pone de manifiesto los abusos de poder del General quien solo sabe resolver las cosas a cañonazos o las investigaciones que tiene que hacer el profesor Zeta para su gobierno, investigando la seta atómica y todas esas partículas radiactivas con un fin armamentístico.
Pero sobre todo, Rodari nos va a enviar un mensaje de paz, transformando lo que podía ser un arma peligrosa en una enorme y rica tarta capaz de satisfacer a todos los niños de Roma. Y ese mensaje nos lo subraya al final del libro con esta frase:
" Y habrá para todos, un día u otro, cuando se hagan tartas en lugar de bombas "
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