Páginas

lunes, 30 de junio de 2025

EL MONJE LECTURA COMPARTIDA DEL MES DE JUNIO


 

El mes de junio ha tenido como protagonista en nuestro club de lectura esta novela gótica ligada al género de terror que tuvo su máximo esplendor a finales del siglo XVIII y a lo largo de todo el siglo XIX. El Romanticismo se alía con este género donde hemos podido convivir con escenarios tenebrosos enmarcados en criptas, abadías o castillos con sucesos paranormales unido a escenas eróticas, amores enfermizos o personajes con grandes conflictos internos. Todo esto y mucho más es lo que hemos podido experimentar con esta lectura que ha tenido sentimientos encontrados.

Escrita en 1796 es considerada, por la crítica, la mejor novela gótica jamás escrita en tan solo diez semanas y es que Mathew G. Lewis con tan solo veinte años y sin apenas experiencia literaria se atreve a escribir una meditada crítica a la Iglesia, la Inquisición española elaborando un cuidado discurso sobre el miedo y el horror a través de los elementos de la novela gótica que he mencionado anteriormente.

Su protagonista, Ambrosio, es el monje más venerado de Madrid. Nadie duda de su santidad, su castidad, su virtud intachable. Pero su supuesta perfección es, en realidad, una cárcel. Ha sido criado en los muros del convento, aislado del mundo, del cuerpo, del amor. Su vida da un giro radical cuando cae en una espiral de deseo, herejía y violencia con otros personajes como Antonia, Matilde, Inés...

Todos los miembros del club han coincidido en que hay que tener en cuenta la época en la que está escrita y el acto de valentía del autor para hablar de sexo, brujería, corrupción y doble moral dentro de los muros de un convento. 

Se ha criticado mucho a El monje por sus excesos melodramáticos, por la violencia hacia las mujeres, por su estructura desordenada y por momentos de descomunal brutalidad . Y no sin razón. Pero también hay en ella un magnetismo innegable. El ritmo narrativo es vertiginoso, la tensión crece con cada capítulo, y la caída de Ambrosio se sigue con la intensidad de una tragedia clásica. 

La obra acusada de obscena, blasfema, peligrosa para la juventud y corruptora de la moral,  más de dos siglos después se sigue leyendo y es que Mathew G. Lewis, a pesar de su juventud, construyó una novela que no solo provocaba, sino que nos ha hecho hablar del poder y la represión, la hipocresía religiosa, las mujeres protagonistas que viven entre la virtud y la tentación o los fenómenos paranormales.


Mathew G. Lewis


“Para un corazón no familiarizado con el vicio éste es mucho más peligroso cuando se agazapa detrás de una máscara de virtud.”

miércoles, 11 de junio de 2025

El GUERRERO A LA SOMBRA DEL CEREZO: LECTURA COMPARTIDA DEL MES DE MAYO

Esta novela es un ejemplo sorprendente de cómo la determinación de un autor puede abrirse paso más allá de las barreras de la edición tradicional. David B. Gil inició su viaje literario autopublicando esta obra literaria en 2014, sin apoyo de grandes sellos, y confiando únicamente en la fuerza de su historia y el boca a boca de los primeros lectores. Tres años después, el respaldo de una editorial de prestigio, Suma de Letras , confirmó que una obra de calidad, bien contada y apasionante, puede emerger desde la independencia hasta alcanzar el mercado convencional.

Ambientada en la convulsa transición entre el siglo XVI y el XVII en Japón, la novela despliega una ambientación vibrante: los últimos estertores del período Sengoku (la “era de los estados en guerra”) ceden al orden autoritario del shogunato Tokugawa en el período pacífico denominado Edo. El lector recorre castillos amurallados y bosques de cedros; vislumbra tramas de venganza que se fraguan en los salones de los daimyō ( señores feudales ), conoce el rígido código del bushidō y asiste a la primera irrupción de la pólvora europea, que trastoca la guerra samurái.

En el centro de la trama está Seizō Ikeda, el joven superviviente de un linaje masacrado, forjado en el fuego de la venganza. Al otro lado, Ekei Inafune, médico occidentalizado, aporta su voz racionalista y científica. Seizō encarna el arquetipo del bildungsroman —o en la llamada novela de formación— pues su trayectoria va más allá del simple protagonista con ansias de venganza: madura, cuestiona su propio código y acaba eligiendo su verdadero camino. Ekei, a su vez, se convierte en su contrapunto ético: mientras el samurái aprende con la espada, el médico enseña que el verdadero filo está en la mente.

Completan el mosaico personajes que nos han resultado inolvidables: Kenzaburō Arima, que personifica el honor inquebrantable del samurái; Fuyumaru, otro de los maestros, del que Seizō aprende el arte del engaño como arma estratégica; Yukie Endo, militar enviada a la batalla que nos muestra lo complicado que era ser mujer y samurai; y O-Ine Itoo, jefa médica que defiende la tradición científica del clan Yamada con mano firme y mirada sagaz, entre otros muchos.

La novela entrelaza: el thriller histórico, con escenas de conspiraciones y asedios que mantienen la tensión; el bildungsroman o novela de formación, al seguir el crecimiento interior de Seizō; y la intriga política, donde alianzas y traiciones dictan el destino de clanes enteros. Gil maneja estos elementos con maestría, alternando escenas de acción con pasajes de reflexión íntima, como meditaciones bajo la sombra de un cerezo en flor (sakura )

La prosa es otro de los aspectos que nos ha cautivado pues combina lirismo y precisión. Las descripciones de la niebla matinal en los montes de Izumo o de la quietud en un té ceremonioso conviven con diálogos contundentes, fieles al habla cortesana y al pulso dramático de la corte feudal. El ritmo se apoya en cambios de escenario: un duelo a espada deja paso  al sosiego de un templo  donde un monje alerta del peligro.

En el corazón de la obra laten varias temáticas clave: el eterno conflicto entre deber y deseo, la tensión entre tradición y cambio, y el debate sobre si la verdadera victoria reside en el acero o en la sabiduría. Seizō y Ekei son “espejos asimétricos”: uno podría haber terminado siendo el otro, según los caprichos del destino. El encuentro de ambos modos de ver la vida —el idealismo guerrero y la mirada científica— desemboca en una reflexión universal sobre la libertad de elegir, el coste del honor y el sentido último de la justicia.

El guerrero a la sombra del cerezo no es solo una novela histórica ambientada en el Japón feudal : es un viaje de iniciación, un tratado sobre la ambigüedad moral y un fresco político de un Japón al filo de la unidad. Su éxito, desde la autopublicación hasta la edición profesional, demuestra que las historias poderosas siempre tienen un público al que atrapar.


David B. Gil


" Yo solo puedo enseñarte, lo que aprendas dependerá solo de ti "

El guerrero a la sombra del cerezo